Teniendo en cuenta la competencia motriz como eje vertebrador en torno al cual han girado el resto de competencias y que lleva implícito “saber”, “hacer” y “ser” contribuyendo al desarrollo integral del alumnado, citamos a continuación la manera en la que el rugbycesto facilita la adquisición de la competencia de aprender a aprender.
Aceptando retos y desafíos, planteándose preguntas y buscando la mejor respuesta dentro de las posibles, buscando metas alcanzables, teniendo en cuenta las experiencias lúdicas y deportivas vivenciadas que dan lugar a la transferencia a situaciones motrices similares concretadas en el rugbycesto, autoevaluándose y participando en procesos de coevaluación, se desarrolla la competencia de aprender a aprender.
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